Se dice que las diferentes lenguas influyen en nuestra forma de entender la realidad. En la universidad discutíamos este tema especialmente desde el punto de vista del léxico. Era común el ejemplo de los esquimales, que tienen más de diez palabras para nombrar diferentes tipos de nieve.
Estudiando húngaro encuentro estructuras gramaticales que me resultan extrañísimas (aunque gradualmente las voy automatizando).
Por ejemplo, en Duolingo me salió esta oración:
Azokon a széles folyókon sok nagy hajó úszik
Ocho palabras. Si hago una traducción "por partes" tendría: 1(esos+sobre) 2(los) 3(ancho) 4(ríos+sobre) 5(muchos), 6(grande) 7(barco) 8(navega). Una traducción más natural requiere un órden de palabras muy diferente: Muchos barcos grandes navegan sobre esos anchos ríos.
Además, en húngaro debo notar la armonía vocálica, la oposición definido/indefinido en la conjugación, laposición de los afijos y un sistema diferente de concordancia de género y número.
¿Qué le estará haciendo este idioma a mi cerebro?
No hay comentarios:
Publicar un comentario